sábado, 17 de noviembre de 2018

UN PUEBLO SIN CULTURA Y ALIENADO ES PRESA FÁCIL DEL ENGAÑO


Un pueblo sin cultura y alienado,
es fácilmente engañado y doblegado
                                                                           Por Carlos Villacorta Valles
                                                                           odesi12@yahoo.es

Preguntados los que entienden de psicología de masas y auscultan el alma de un pueblo: ¿nuestro pueblo, ha perdido la capacidad de indignación? ¿Por qué nuestro pueblo no responde ante tanta promesa incumplida, ante tanta corrupción y delincuencia enternada? La respuesta fue contundente ¡Estamos alienados!

Alienación es un término y concepto que hace tiempo no se escucha. Está siendo ocultado por los que tienen el control de la economía, la cultura, la educación y los medios masivos de comunicación, ¿no les conviene? ¡Claro que no! No les conviene que la gente se dé cuenta de su estado de alienación, porque si se da cuenta, recupera su capacidad de indignación y de hecho pasa a la insurgencia constitucional. Pero, dice el dicho popular: “no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo aguante”.

 Etimológicamente, alienación deriva del latín ălĭēnātĭo, ōnis: alejamiento, privación; procedente a su vez del adjetivo ălĭēnus: propio de otro, extraño a uno, ajeno. Según la RAE, la alienación es la pérdida o alteración de la razón o los sentidos; pérdida de identidad que sufre una persona o grupo. Dentro del campo de la filosofía, Hegel afirma que la alienación es el extrañamiento o distanciamiento del sujeto en relación consigo mismo. Ludwig Feuerbach, nos dice que es la renuncia de nuestra propia naturaleza en favor de la de un ser en el cual reconoce a Dios. Karl Marx, interpreta como pérdida de identidad como ser humano, ocasionado por el sistema de explotación, donde el ser humano es una cosa más, una mercancía, representa una cantidad de dinero. Herbert Marcuse, se basa en la alienación causada por la tecnología, la cultura de medios de comunicación y el consumismo masivo, mediante los cuales el Estado capitalista consigue esclavizar a la sociedad. Para la Psicología, la alienación es un estado mental que se caracteriza por la pérdida del sentimiento de la propia identidad.

En resumen, la alienación es la deformación de nuestra personalidad, una deshumanización, un proceso inducido por los que tienen el control del sistema, para mantener las cosas tal como están; proceso de trasformación de nuestra conciencia hacia la pérdida de lo que nos pertenece o que constituye nuestra esencia, nuestra identidad o perdida del control de sí mismo, para actuar hasta en nuestra contra, por ejemplo un obrero que vota por un partido político de empresarios; gente que defiende el sistema social que le explota y margina, rechazar algo que nos beneficia. Pérdida que puede ser individual y colectiva.

Las 15 características del ser humano alienado:

1. Indiferencia y defensa del sistema de explotación.
2. Entregar nuestro futuro (destino) a un designio desconocido como el crear un Dios.
3. Trabajar para el mercado capitalista y no para las necesidades humanas.
4. Nuestro trabajo es obligatorio y no nos pertenece. Nos esclaviza y convierte en mercancía.
5. Nuestro trabajo no satisface nuestras necesidades, sino la del patrón.
6. Pertenecer al patrón en cuerpo y alma. Despreciar la organización gremial.
7. No ser consciente que el Estado nos oprime y explota.
8. Compramos lo que la publicidad dicta, sin evaluar la necesidad.
9. Despreciar nuestra cultura por la ajena o extranjera. Copiar lo que hacen otros.
10. Cuando pensamos como ricos siendo pobres. Dejarse llevar por la moda.
11. Negarse a ser factor activo de nuestra propia realidad a favor de los demás.
12. Cuando las riquezas de nuestro país y la naturaleza nos son ajenas y hostiles.
13. Cuando pobreza y riqueza son atribuimos a la mala y buena suerte o al saber hacerse rico.
14. Pensar sólo en el dinero y la riqueza y no en el ser humano.
15. Fomentar cultura de la incultura: pobreza intelectual, negar la verdad. No analizar, no pensar.

Sin embargo, el mayor grado de alienación que sufrimos es cuando defendemos el sistema de explotación del que somos víctimas o nos mantenemos indiferentes. Siendo la alienación principal la económica, protegida por la alienación religiosa, cuyas características son: corrupción, ineficiencia, individualismo, afán de lucro, dogmatismo, etc., basada en la propiedad privada, del cual dependen las demás alienaciones. Esta alienación enajena totalmente nuestras propias facultades creadoras, sólo trabajar o hacer algo por dinero, forzados y sometidos. Lo que producimos no nos pertenece, divide la sociedad en clases sociales antagónicas: la clase oprimida que produce las mercancías y la clase opresora que se apropia de ellas.

Para evitar malos entendidos, nadie está renunciando al dinero; el dinero es un medio, no es absoluto como nos hacer creer por todos los medios, tampoco renunciamos a los inmensos avances de la ciencia y la tecnología, eso es materialmente imposible. Lo que se está planteando es un nuevo sistema, más justo, con más oportunidades, contra todo tipo de opresión.

Desde que nacemos, los que controlan el poder económico, logran que pensemos, actuemos y veamos el mundo con los mismos ojos de ellos. Adormecen nuestra conciencia de clase. Entendiendo la conciencia de clase como el darnos cuenta de la existencia de la alienación económica, política, cultural, social y religiosa del cual somos víctimas. Negamos el análisis.

Medios y formas del que somos víctimas de alienación:

TV,  radio, periódicos, política e instituciones, son el centro de nuestra alienación y enajenación. No se dan por separado, interactúan, se interrelacionan y producen el mismo efecto: la alienación, con mensaje y principalmente imagen. Nos hacen vivir una realidad virtual.

1.  Con publicidad, propaganda y consumo: se meten en nuestras emociones con morbo y erotismo, asociando éxito y poder. Más utilizada la mujer y los niños. Manipulan nuestros gustos.

2. Con manipulación política e instituciones: nos imponen ideas políticas, conceptos, manipulando nuestra opinión, infundiendo temor, con difamaciones y calumnias, para validar e invalidar personas e instituciones, partidos políticos, la democracia, la justicia, la libertad, etc.

3. Con imposición de patrones de conducta y cultura ajena: inclusive valores y cuerpos ajenos a nuestras circunstancias y realidad, manipulando la belleza, la juventud y el éxito, la cirugía estética, la música, la vestimenta, la moda, vida y costumbres que nos son ajenos.

4. Con educación ajena a nuestra realidad: filosofía y teorías pedagógicas que se traen de otros países y nos imponen, afianzando el individualismo, la competencia insana, el egoísmo y el desprecio a lo nuestro. Divorcio total de la enseñanza y la vida.

Medios y formas de desalienarnos

La alienación es un poderoso instrumento para frenar los cambios estructurales en la sociedad. En los países donde los oprimidos tomaron el poder, su principal traba fue la alienación económica y religiosa, por ello, le fue fácil al capitalismo restaurarse, porque los que construían el socialismo lo hacían con esa poderosa carga de alienación. Es que no podemos hacer nada nuevo y diferente, sin ser nuevos ni diferentes. Por tanto, tenemos que desarrollar un poderoso proceso de desalienación.  Vernos con nuestros propios ojos” como dice Aram Aharonian.

La desalienación tiene que ser un proceso de reencontrase con uno mismo, enfrentando la cultura, ideología y política del opresor, para la recuperación de nuestra personalidad, capacidad de decisión. Buscar que los niños y jóvenes equilibren su autoestima, con el control de programas que se emiten por la TV, radio, Internet, buscando formas de difundir políticas de recuperación y fortalecimiento de nuestra identidad tanto individual como colectiva, reconciliarnos con nuestra cultura despreciada; organizarnos y entablar luchas en común, viviendo y actuando acorde a la nueva sociedad que queremos construir. Más educación científica, más cultura, más democracia real, más lucha por la libertad y la justicia, más conciencia de clase.  Paulo Freire enseña: “los oprimidos no obtendrán su liberación por azar, sino buscándola en su praxis y reconocimiento en ella que es necesario luchar por conseguirla”

La desalienación no es para mañana, ni pasado mañana, no es un proceso indispensable y fundamental para ponerlo en práctica el día que nos ocurra; es un gran proceso para hoy y debe ejecutarse en el trabajo, en la organización, en la familia, en la oposición al sistema, en la oposición a las guerras imperialistas, en las instituciones educativas, en la crítica de la cultura dominante, etc.

Hay que transformar desde la raíz, la educación, la cultura, la enseñanza de la juventud, el esfuerzo de las nuevas generaciones que sea permanente, lo que nos dará como resultado la forja de una nueva y mejor sociedad. Hay que acercar el libro a la vida, el arte, la poesía a la vida.

¿Posible? Sí, es posible elegir otra nueva y mejor sociedad, otro futuro mejor,  un futuro que beneficie a todos, donde la persona esté primero que el dinero. Es posible poner fin a la pobreza, el hambre y la miseria.

Fuentes:

-Ernesto Carmona. Medios, los amos de la información. www.aporrea.org
-Las formas ocultas de la propaganda y Los artífices del derroche. Editorial Sudamericana, Bs.As., 1959 y 1961
-Aram Aharonian. Vernos con nuestros propios ojos. Fondo Editorial Question y Universidad Latinoamericana y del  
  Caribe, Caracas, 2007. http://www.cronicon.net/paginas/Documentos/paq2/No.15.pdf
-Carlos Marx. Manuscritos económico-filosóficos (1844).
-Herbert Marcuse. La Alienación y el hombre unidimensional.
-http://www.muyinteresante.es/cultura/arte-cultura/articulo/diez-grandes-frases-de-hegel-961377593752
-http://www.frasesypensamientos.com.ar/autor/ludwig-feuerbach.html

miércoles, 14 de noviembre de 2018

EDUCACIÓN, CURRÍCULO, DOCENTE Y HORAS DE CLASE

EDUCACIÓN, CURRÍCULO, DOCENTE Y HORAS DE CLASE
Una necesaria reflexión al finalizar el año escolar 2018
                                                                                                           Por Carlos Villacorta Valles
                                                                                                          odesi12@yahoo.es


Estamos cansados de escuchar mentiras, “La nueva política curricular busca consolidar un camino, iniciado hace varias décadas, para dejar atrás una enseñanza memorística y repetitiva” (http://www.minedu.gob.pe/politicas/aprendizajes/index.php). Del dicho al hecho ministerial, hay un abismal trecho. Hasta el siglo XVII el currículum era un conjunto de asignaturas, al siglo XVIII planes y programas y, actualmente, es todos los medios deseables para conseguir un buen aprendizaje.

En el Perú se presentan en paquetes de planes y el docente tiene que cumplirlos. Prácticamente seguimos en el siglo XVIII. A fines de la década del 60 y principios del 70 del siglo anterior en algunos países latinoamericanos, se debatía sobre si el currículo era una “Disciplina científico aplicada” por lo mismo del avance del conocimiento; se hablaba de la “selección y organización de experiencias” de la “Defensa de la creatividad y la libertad” el “reemplazo del profesor por el de facilitador”, etc. En filosofía “la manera totalizante de pensar”, se planteaban ya que “la realidad es un todo holístico”; (Leer revista “currículum” –Año 3/ Nº 5/ julio 1978 de la OEA, auspiciada por la Universidad Simón Bolívar de Venezuela); en nuestro país recién se está introduciendo esta terminología como novedad.

De esta manera, los materiales curriculares no se extraen de nuestra realidad, sino vienen empaquetados de otros países. Seguramente para cubrir estas carencias, siempre se escribe que son flexibles, incluso actualmente se nos da una décima de horas para complementar con lo que nos parece. ¿Qué flexibilidad puede haber en un sistema educativo totalmente rígido a merced de la normatitis? Enjaulado en horas de clase, alejados totalmente de la investigación y la experimentación científica. Sencillamente “cumplir el dictado de clases” es el mandato imperativo. Actualmente incluso con el aumento de horas de dictado de clases porque en otros países tienen más, sin tomar en cuenta por qué lo tienen y que es lo que hacen; simplemente pensando que “a más horas de clase más educación”. Ridículos burócratas.

Esta estrategia aumentativa de horas sin por qué ni para qué, sin tomar en cuenta incluso el estado nutricional de nuestros niños, la situación laboral infantil de más de dos millones de ellos, indudablemente está causando el efecto contrario: a más horas de clase, más cansancio y peor educación.

Hasta el momento se aprende y se enseña en base a un currículo impuesto, abstracto, fuera de nuestra realidad. Los docentes que son los ejecutores y tienen la experiencia del caso NO SON PARTÍCIPES en su elaboración, por el contrario, son obligados a hacer tal y como el ministerio manda. Estos burócratas, se olvidan de lo que copian: “El Ministerio de Educación asume como política priorizada que los docentes se formen y desempeñen en base a criterios concertados en el marco de una carrera pública renovada”. Se lee en su Web.

Alegremente, “El Ministerio de Educación asume como política priorizada que los docentes se formen y desempeñen en base a criterios concertados en el marco de una carrera pública renovada. En ese contexto, la Política Integral de Desarrollo Docente tiene el objetivo de promover la innovación y el desarrollo del conocimiento pedagógico, así como a generar el compromiso de los docentes con su propio desarrollo profesional”. (http://www.minedu.gob.pe/politicas/docencia/)

Es bonito lo que copian, pero, HACEN LO CONTRARIO; aplican una decadente “meritocracia” con “evaluaciones” amañadas, que sólo obligan a "ascender" para “ganar más”, que, lejos de renovar, desactiva a los docentes en todo sentido y, en el peor de los casos los vuelve “egomaniáticos”; sobre todo los que “ganan” supuestos concursos para “especialistas” en las ugeles: creer que lo saben todo y son mejor que los otros. Pobres docentes.

Contrariamente a sus prédicas, el ministerio de educación ha profundizado la rutina de los docentes. Aquí una especie de decálogo rutinario:

1.- Aceptar pasivamente y sin chistar lo que las “autoridades educativas” nos imponen.
2.- Alejarme de los maestros críticos, para no ganarme la mala voluntad de las autoridades.
3.- Dejarlo todo a la “voluntad” de las autoridades y la “decisión” final de Dios.
4.- Dedicarme sólo al trabajo individual y no buscar la articulación de lo individual y colectivo.
5.- Seguir pensando en cantidad, cuantas más horas trabaje y cuadernos llene, seré el mejor.
6.- Creer que no puedo cambiar. “Ya tengo mi forma de ser”.
7.- Seguir copiando de los programas curriculares tal y como me las dan.
8.- Seguir sin comprender que puedo también ser alumno y aprender de mis alumnos.
9.- Seguir divagando, implementando el divorcio entre el libro y la vida práctica.
10.- Seguir con mi evaluación exclusiva memorista, de control de información.

LA GRAN RESPONSABILIDAD DE SER DOCENTE

La mayoría de docentes conocen su realidad, pero están atrapados por la imposición y la normatitis, acostumbrados a copiar lo que le dan, peor aún, sin un sindicato que los defienda. Necesitan entonces, de un cuadro de ideas o temas de la realidad, con los requerimientos ideológicos y políticos necesarios que faciliten el análisis e interpretación de esa realidad y poder transformarla. Tienen que juntarse todos los docentes, formando círculos pedagógicos de estudio y lucha en los cuatro terrenos fundamentales de la labor docente: Económico, pedagógico, ideológico y político y forjar un currículo transformador.

Las experiencias de aprendizaje no pueden seguir dándose en el vacío. No esperar más. No seguir siendo un docente “oficial”. Transfórmate en docente social. Realmente en un líder social. Estudiando, aprendiendo y enseñando críticamente. Actuado críticamente y por ende transformando el abstracto currículo impuesto en un cuadro de ideas y contenidos de nuestra realidad en función de una educación mejor, un docente mejor, un estudiante mejor y por ende una sociedad mejor. El buen docente tiene que trascender más allá de su aulajaula. Autoedúcate querido docente, conoce más allá de lo que te dicen, porque no se puede hacer lo que no se conoce, tampoco criticar y mucho menos amar lo desconocido. El ser humano es un ser social y, la esencia del saber está en la práctica social. Por eso se dice que la educación en el Perú es subjetiva, porque no tiene relación con la práctica social. Lo que enseñamos actualmente no parte de la práctica social. Y, peor aún, no tiene forma de aplicación en nuestra vida diaria. El ser humano que conoce la realidad lucha para transformarlo. Nuestros niños y jóvenes necesitan con urgencia este tipo de enseñanza y aprendizaje. Ahí está la clave del asunto para que nuestros estudiantes tengan mejor nivel académico, y, lo que es mejor, adquieran pensamiento científico. Es lo que llamamos educación transformadora. Liberar a nuestros alumnos de todos los vicios de este sistema es una gran responsabilidad. En tus manos está la decisión y, quien sabe la solución.

¿CÓMO EVALÚA UN DOCENTE TRANSFORMADOR?

La evaluación escolar en el Perú es una especie de sanción, no comprueba logros, ni avances, ni dificultades, sólo mide información más aún es el centro de la educación. El buen alumno es el que obtiene las más altas calificaciones. En otras palabras: el eje de la educación es el examen y su nota. No contribuye absolutamente en nada en mejorar la educación, a no ser a humillar y avergonzar al estudiante. Cuando el docente dice: “Este es el rol de exámenes” o en todo caso “mañana tomo examen” en el tono que lo diga, suave o fuerte, siempre causa temor y ansiedad en el estudiante. Y, es que precisamente, el informe que tiene que presentar sobre promoción y repitencia está basado en el examen. La evaluación le convierte en un superdocente. Este superdocente sólo evalúa los éxitos y los fracasos de sus estudiantes.

De esta manera: el alumno se prepara para el examen; el padre exige a su hijo un buen examen; el profesor informa las notas de los exámenes. La palabra examen es un fantasma que recorre todas las aulas, las calles, el hogar y la cabeza de todos los burócratas educativos. Los colegios privados no toman examen si el alumno no ha pagado pensión.

Por su parte, el docente transformador, debe evaluar científicamente, democráticamente y equilibradamente. Esto es, lograr que la evaluación vaya más allá del examen cuantitativo numérico, aproximarnos un poco más cerca a la realidad del alumno, escucharlos a ellos, suscribir datos, criterios, consignas y propósitos de orientación y mejoramiento del rendimiento académico no sólo del alumno, sino también del propio docente. Lograr que la evaluación sea parte de la lección no el fin. La evaluación debe ser liberadora, resolviendo prejuicios, taras, individualismos y consolidar formas de conocer mejor y aportar a un aprendizaje mejor. Transformar las instituciones educativas en gérmenes de la nueva sociedad, donde se desarrollen todas las oportunidades, todas las capacidades y sean atendidas todas las necesidades de nuestros alumnos y sus familias.